MADRID, 11 Ago. (EDIZIONES) –
Hoy en día hay varias formas de medir la tensión. La técnica manual suelen realizarla los médicos con el fonendoscopio y un brazalete que se infla; pero también desde casa podemos hacerlo con los tensiómetros; y hoy en día, y a nivel ‘amateur’ se están empleando los relojes inteligentes, si bien estos deben emplearse como mediciones complementarias a las anteriores.
Así, la mejor manera de medir la presión arterial desde casa implica la utilización de un tensiómetro y seguir una serie de pasos “para asegurar lecturas precisas”, tal y como defiende en una entrevista con Europa Press Infosalus la miembro del Consejo General de Enfermería María Ángeles Gómez, y supervisora de enfermería del Hospital Universitario Príncipe de Asturias (Comunidad de Madrid).
Así, plantea seguir las siguientes pautas:
1. Asegúrate de estar en un estado de reposo y relajado.
2. Descansa al menos 5 minutos antes de la medición.
3. No fumes, no consumas cafeína, ni realices ejercicio físico al menos 30 minutos antes de medir la presión arterial.
4. Realiza la medición en un ambiente tranquilo y sin distracciones.
5. Siéntate en una silla con respaldo, con los pies apoyados en el suelo, y sin cruzar las piernas.
6. Coloca el brazo sobre una mesa o superficie plana, de manera que esté al nivel del corazón.
7. El brazalete debe estar ajustado sobre la piel desnuda, no sobre la ropa.
8. Asegúrate de que el brazalete esté bien ajustado, pero no demasiado apretado; debe quedar espacio suficiente para insertar un dedo entre el brazalete y el brazo.
9. No hables, muevas el brazo, ni te muevas durante la medición; mantén una respiración normal y tranquila.
CUÁL ES EL MEJOR MOMENTO PARA MEDIRNOS LA TENSIÓN ARTERIAL
Después, le preguntamos a esta experta sobre el momento ideal para medir la presión arterial, “importante para obtener lecturas precisas y consistentes”, señalando lo siguiente: “La presión arterial debe medirse cuando estás en un estado de reposo y relajado; evita medirla inmediatamente después de realizar ejercicio; de consumir cafeína, o de fumar, o estar en una situación de estrés, ya que estos factores pueden elevar temporalmente los valores”.
Dice que para obtener lecturas comparables es útil medir la presión arterial a la misma hora cada día; al mismo tiempo que precisa la miembro del Consejo General de Enfermería María Ángeles Gómez que si tomas medicamentos para la presión arterial, es útil medirla antes de tomar la dosis diaria, para evaluar la efectividad del tratamiento.
“Asegúrate de que la habitación esté tranquila y que estés sentado en una posición cómoda con la espalda apoyada y el brazo descansando a la altura del corazón. Evita hablar o moverte durante la medición”, agrega.
Igualmente, mantiene que es recomendable evitar medir la presión arterial justo después de comer una comida pesada o consumir bebidas alcohólicas, ya que estos factores pueden influir temporalmente en los resultados. “Siguiendo estas pautas, puedes obtener lecturas de presión arterial más precisas y consistentes, lo que es esencial para el monitoreo efectivo de la salud cardiovascular”, recuerda.
EL EMPLEO DE SMARTWATCHES O DE APPS MÓVILES: ¿SÍ O NO?
A su vez, le cuestionamos a la supervisora de enfermería del Hospital Universitario Príncipe de Asturias sobre el empleo de relojes inteligentes y de aplicaciones salud para medir las pulsaciones o la tensión arterial, indicando que lo idóneo es emplear estos dispositivos como herramientas complementarias, y no como sustitutos de la orientación de profesionales de la salud. “Es aconsejable verificar periódicamente los resultados con métodos de medición estándar, y discutir cualquier cambio significativo con un médico o con una enfermera”, remarca.
Tal y como apunta, los dispositivos de medición de presión arterial sin brazaletes, como los relojes inteligentes o ‘smartwatches’ y aplicaciones móviles, pueden ser útiles en varias situaciones, siempre que se usen con las precauciones necesarias.
Apunta que pueden ser útiles para usuarios que deseen monitorear su presión arterial con regularidad y detectar patrones o tendencias a lo largo del tiempo: “Por ejemplo, pueden ayudar a identificar si la presión arterial tiende a ser más alta en ciertos momentos del día, o en respuesta a situaciones de estrés”.
Para las personas con hipertensión controlada o en riesgo, estos dispositivos pueden servir como una herramienta adicional para monitorizar la presión arterial entre las consultas con su enfermera, prosigue María Ángeles Gómez; sin embargo, sostiene que cualquier cambio significativo debe ser discutido con un profesional de la salud.
“Los dispositivos pueden motivar a los usuarios a adoptar hábitos más saludables al proporcionar retroalimentación inmediata sobre cómo factores como la dieta, el ejercicio y el estrés afectan su presión arterial. Estos dispositivos pueden ayudar a educar a los usuarios sobre la importancia de la presión arterial, y a la hora de saber cómo los factores del estilo de vida pueden influir en ella”, añade.
Considera igualmente que muchos dispositivos y aplicaciones pueden programarse para enviar alertas o recordatorios, lo que ayuda a los usuarios a mantener un registro más constante y a ser más conscientes de su salud cardiovascular.
“Aunque estos dispositivos ofrecen beneficios es crucial recordar que no deben reemplazar el asesoramiento y diagnóstico profesional. Las mediciones obtenidas deben considerarse como datos complementarios, y deben verificarse con dispositivos médicos certificados, especialmente en casos de cambios significativos o síntomas preocupantes. Siempre es recomendable discutir cualquier resultado anormal con un médico para obtener una evaluación adecuada y precisa”, concluye la la miembro del Consejo General de Enfermería María Ángeles Gómez.