MADRID 2 Oct. (EUROPA PRESS) –
El riesgo de transmisión del virus de la encefalitis transmitida por garrapatas a través de sustancias de origen humano es bajo, según un reciente informe publicado por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés).
De este modo, el ECDC ha publicado una evaluación sobre la encefalitis transmitida por garrapatas (ETG), centrada en los riesgos de transmisión del virus de la ETG (VETG) a través de sustancias de origen humano (SoHO) como sangre, órganos, tejidos y células.
La encefalitis transmitida por garrapatas es una enfermedad viral transmitida principalmente a través de este ácaro. Entre 2013 y 2022, se notificaron 28.680 casos confirmados de ETG en la Unión Europea, la mayoría en el centro y norte de Europa.
La mayor parte de las infecciones por el virus de la ETG permanecen asintomáticas; sin embargo, se han notificado afecciones a largo plazo en una proporción considerable de pacientes con síntomas neurológicos, con una tasa de letalidad de alrededor del 0,5 por ciento.
Aunque está documentada la transmisión del virus de la ETG a través de SoHO, la evaluación sugiere que estos casos son “extremadamente raros”, de hecho en España no se ha registrado ningún caso. En particular, se notificaron dos casos por transfusión de sangre de un único donante y tres por trasplante de órganos, también de un único donante.
Pese a que no se puede evaluar el riesgo de transmisión del virus de la ETG por transfusión de sangre, la probabilidad de que la transmisión del virus por transfusión de sangre provoque una enfermedad sintomática se considera muy baja.
Asimismo, el riesgo de transmisión del virus de las ETG a través del trasplante de órganos también se considera bajo. En ausencia de casos notificados, no puede evaluarse el riesgo de transmisión del virus de las EET a través del trasplante de tejidos y células.
En este sentido, el ECDC subraya que, aunque se pueden considerar medidas preventivas durante los periodos de transmisión del virus de las ETG, “sigue habiendo incertidumbres debido a las considerables lagunas en la investigación”.
Las recomendaciones incluyen aplazar durante 28 días los donantes de sangre que declaren mordeduras recientes de garrapatas y realizar pruebas serológicas y moleculares del virus de las ETG en donantes de órganos, tejidos y células que puedan haber estado expuestos. Además, el aumento de las tasas de vacunación en zonas altamente endémicas podría reforzar la seguridad general en relación con la transmisión del virus de la ETG a través de SoHO.